Entre las cosas bellas que he vivido, vivo y puedo contemplar está el trabajo que realizo acompañando a otras personas a avanzar en su camino a la felicidad.
Disfruto cabalgando entre las técnicas, la maravilla de la mente, la individualidad y la magia de la terapia.
Ser coautor de esta obra donde las fuerzas superiores están tejiendo y permiten acompañar suavemente el proceso es un privilegio, un honor.
Pasan las horas en el reloj del tiempo, mientras, en la otra dimensión, estamos planeando sobre estos hilos construidos, brillantes, entonados, luminosos.
Esa hermosa atmósfera de paz, de tranquilidad, de verdad.
En cada escalón, una nota.
En cada idea, una creación.
En cada suspiro, un aliento.
En cada sonrisa, un ángel.
En cada lágrima, la sal, la chispa, los minerales.Y la recarga de energía. La paz. La sonrisa. La tranquilidad.
¡Menudo baño de emociones!
Gracias Universo por tan bello espectáculo.